sábado, 1 de febrero de 2014

CAPITULO 25.


-Por favor trátame de tu no de usted y si te tengo que agradecer, gracias a ti mi hijo se podrá recuperar, si no hubiera sido por ti, mi hijo hubiera muerto-dijo Stormie.
-De nada-dijo Ross.

Stormie se sentó en el pequeño sofá, veía con Ross “dormía”, en realidad él no dormía, solo estaba con los ojos cerrados ya que no los podía mantener abiertos, le pesaban.

Stormie de vez en cuando se quedaba mirando a Ross, pensaba en su hijo, en su hijo al que dejaron, ella nunca quiso hacerlo pero debido a su economía no les quedaba otra opción.

NARRA STORMIE.

Llegue hasta la habitación en la que estaba Ross, entre y me senté en el pequeño sofá como el que había en la habitación de Rocky y dije en voz alta:

-Gracias.

Pude ver como él sonria y dijo:

-De nada.

Me senté a su lado, en el pequeño sofá que había en la habitación. De vez en cuando me quedaba mirándole, pensaba en mi hijo, en el pequeño bebe que dejamos, yo nunca quise dejarlo pero no nos quedo otra opción debido a nuestra economía.

Mi bebe tendría que tener ahora 17 años, mi pequeño nació el día 29 de diciembre, lo recuerdo perfectamente y justo el día de después que fue cuando a mi me dieron el alta, el día 30, fue el día en que lo dejamos en las puertas de aquel orfanato.

-Una pregunta Ross-dije yo.
-¿Si?-dijo él abriendo sus ojos.
-¿Cuántos años tienes?
-17, ¿Por qué?-pregunto él.
-Pura curiosidad-dije.

Ross tenía la misma edad que mi pequeño.

Todas las noches antes de dormir me hacía varias preguntas:
-¿Qué habrá sido de mi pequeño?
-¿Habría sido adoptado por una buena familia?
-¿Vivirá todavía en Estados Unidos?

Sabía que esas preguntas nunca las resolvería igual que sabía que nunca volvería a ver a mi pequeño porque quien sabia donde se encontraría en estos mismos momentos, quien sabía si mis preguntas tenían o no respuesta, quien sabía si nuestra mentira era real, me refiero a que quien sabía si aquel bebe había sobrevivido 17 años, quien sabía si habría podido soportar el frio en aquel viejo orfanato, quien sabía si le habían tratado bien, todo eso nadie lo podía saber, bueno en realidad había una persona que si, aquel hermoso bebe mío.

-Ross-dije.
-¿Si?-volvió a decir él.
-Voy a ver como esta mi hijo, luego vuelvo a venir-dije sonriendo.
-Vale-dijo él y volvió a cerrar los ojos.

Salí de la habitación de Ross dejandole “dormido” y fui hasta la habitación de Rocky, todo seguía igual salvo porque Rocky ya no tenía la bolsa de sangre.

-¿Dónde estabas mama?-pregunto Riker.
-Estaba viendo como se encontraba Ross-dije muy segura.
Riker solo sonrió ante lo que le acababa de decir.

-¿Ha habido algún cambio?-pregunte.
-La transfusión ya esta echa, según lo que han dicho las enfermeras tendría que despertar pronto-dijo mi esposo.
-Mama y si no despierta….-dijo Rydel.
-Seguro que si hija, seguro que si-dije.

Me quede sentada al lado de Rocky, esperaba que mi hijo despertara pronto. Estuve como 3 horas sentada a su lado, veía las caras de preocupación de mis hijos y de mi marido. Durante las 3 horas que estuve sentada al lado de Rocky tenía su mano cogida. Una de las veces pude notar como Rocky apretaba más mi mano y como movía sus dedos, la verdad es que no dije nada a nadie.
  
-Ma….ma-dijo una de las veces en las que había movido los dedos.
-Dime hijo-dije.- Estoy a tu lado.
-¿Dónde están los demás?

Pude ver como mis hijos, ______(tn) y Mark se giraron a mirarle pero Rocky seguía con los ojos cerrados, era como si estuviera hablando en sueños.

-Rocky abre los ojos-dije.

Rocky no volvió a articular palabra.

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Capitulo nuevo, lo siento por no poder haber subido este capitulo antes pero es que hay muchos examenes ahora y no tengo tiempo para escribir, pero aqui esta el capitulo, espero que os guste :)



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